La competencia arrancó con intensidad y precisión, y desde la primera señal de partida, las embarcaciones surcaron las aguas de la Bahía de Valparaíso en una serie de maniobras estratégicas. Las diferentes clases – J24, IRC Crucero, IRC Clásicos y IRC Regata – desplegaron sus velas con destreza, ofreciendo un espectáculo de habilidad y destreza náutica.
En la categoría J24, el velero Gurú, capitaneado por Patricio Rodríguez, mostró una destacada actuación desde el inicio, manteniendo una velocidad constante y maniobrando con precisión en cada viraje. Limbo Rock, comandado por Enrique Colombo, le siguió de cerca, en una ajustada disputa por el primer lugar. Finalmente, Gurú logró imponerse y se llevó el primer puesto, seguido de Limbo Rock en segundo lugar y Manutara, capitaneado por Gabriela Portus, en el tercer puesto.
La clase IRC Crucero no se quedó atrás en emoción. Desde el inicio, el velero Isabella Biotec tomó la delantera con un trabajo en equipo impecable y una excelente lectura del viento y las corrientes. En esta clase, Sputnik se posicionó en el segundo lugar, seguido de Amanda en el tercero, quienes navegaron con determinación y no dejaron escapar ninguna oportunidad para acercarse al líder.
La competencia en la clase IRC Clásicos fue especialmente nostálgica, con embarcaciones anteriores al año 2000 que evocaron la elegancia y el espíritu de las primeras regatas. El velero Tante Sour, capitaneado por Ignacio Alfaro, dominó la prueba con una navegación impecable, alcanzando el primer lugar. Huillinco, bajo el mando de Carlos Escobar, se quedó con el segundo puesto, mientras que Altair, capitaneado por Yerko Katarinich, completó el podio en un respetable tercer lugar.
La clase IRC Regata cerró el evento con una competencia reñida y emocionante. Isabella Biotec, con el capitán Renzo Stagno al mando, demostró su habilidad y control en las aguas, llevándose el primer puesto. Sputnik, capitaneado por Pablo Gimeno, se quedó con el segundo lugar, mientras que Amanda, de Francisco Rompeltiem, completó el podio en el tercer lugar.
Al final de la jornada, los competidores y espectadores se reunieron en la Terraza del Yacht Club de Chile para la ceremonia de premiación. En un ambiente de celebración y camaradería, se entregaron las medallas de la Liga Marítima de Chile, reconociendo el esfuerzo y la dedicación de cada equipo. Esta regata no solo fue una competencia deportiva, sino una celebración de la historia y el legado de la navegación en Chile, que reafirma el compromiso de la Liga Marítima de Chile con el fomento de los deportes náuticos y el desarrollo de nuevas generaciones de navegantes.
110 años de Historia y compromiso con los Deportes Náuticos
Desde sus primeras gestiones en 1914 para promover los deportes náuticos y las regatas, la Liga Marítima de Chile ha sido un pilar fundamental en el desarrollo de la infraestructura náutica y en la organización de eventos a nivel nacional e internacional. En 1940, la Liga impulsó el dragado del estero de Viña del Mar para construir una cancha de regatas y deportes náuticos, con el apoyo de la Asociación de Clubes de Regatas, con el objetivo de posicionar a la ciudad como un centro de atracción turística para deportes acuáticos.
En 1946, la Liga organizó una regata internacional de remo en Valparaíso, ofreciendo premios y recepciones en la "Casa del Marino", además de publicar artículos y un folleto especial sobre el evento en su revista Mar, distribuidos en instituciones deportivas de Chile y del extranjero. Durante las décadas de 1940 y 1950, apoyó la creación y expansión de clubes de regatas y yates en el país, proveyendo embarcaciones, asesoría técnica y en algunos casos financiamiento para los clubes con dificultades económicas.
Para 1949, en otra muestra de su compromiso, organizó una regata internacional de vela y remo en colaboración con el Yacht Club de Chile y la Asociación de Clubes de Regatas de Valparaíso, ofreciendo alojamiento y eventos sociales para las delegaciones participantes. Además, la Liga promovió la formación de patrones de yates mediante cursos, incluso proponiendo su integración en la reserva naval del país, y se comprometió con la creación del Instituto Náutico de Chile para coordinar y supervisar las actividades náuticas a nivel nacional.
Con esta regata aniversario, la Liga Marítima de Chile celebra más de un siglo de historia, consolidando su rol en el fomento de los deportes náuticos y la formación de navegantes en Chile. La Liga agradece a todos los participantes, al público presente y a los patrocinadores por hacer posible este evento que honra la rica tradición de la navegación en nuestro país y renueva el compromiso con las futuras generaciones de deportistas del mar.
Valparaíso, 10 de noviembre del 2024